7.2.06

...para mi amigo Atareq.

Este post es simplemente para darle las gracias a mi amigo Atareq, preocupado más que yo por mi propio blog, para que lo actualice, para que lo renueve, para que lo mejore. ¡Muchas gracias tío! Y que la fuerza de GuK te acompañe.

4.2.06

Lucha de Gigantes.

Lucha de gigantes convierte el aire en gas natural.
Un duelo salvaje advierte lo cerca que ando de entrar.

En un mundo descomunal, siento mi fragilidad.

Vaya pesadilla corriendo con una bestia detrás
dime que es mentira todo, un sueño tonto y no más.

Me da miedo la enormidad donde nadie oye mi voz...

Deja de engañar, no quieras ocultar que has pasado sin tropezar.
Monstruo de papel, no sé contra quién voy o es que ¿acaso hay alguien más aquí?

Creo en los fantasmas terribles de algún extraño lugar,
y en mis tonterías para hacer tu risa estallar.

En un mundo descomunal, siento tu fragilidad.

Deja de engañar, no quiereas ocultar que has pasado sin tropezar.
Monstruo de papel, no sé contra quién voy o es que ¿acaso hay alguien mas aquí?

Deja que pasemos sin miedo...

esta letra, de Antonio Vega, me mata...
¡Luchemos! Para el D.F.

Nina Simone (La historia de los uricates).

A las doce y media buscando entre lemures y uricates apareció entre mis cascos Nina Simone. Me quedé totalmente pasmado. Como si estuviera en Bourbon Street. Oía bullicio en una terraza de madera policromada. Decidí entrar. Seguía escuchando algo, la estaba escuchando, con mi alma abierta, con su soul, con su feeling, y con todas esas palabras que las escribimos en inglés, pero las sentimos en un pentagrama. Y sólo me faltaba verla, así que no vacilé. Entré.

Pillé la tercera mesa más cercana a la tarima, de medio metro de alto. Un cóctel, cualquiera era bueno.

En el escenario podía ver a Nina, la voluptuosa diosa de ébano, en el medio de un triángulo formado por unos jóvenes pero talentosos músicos. Esta vez no tocaba ella el piano, lo hacía Alvin. A la izquierda de la cantante, el gran Tony Jones marcando la base con esos fuertes dedos, pulsando las gruesas cuerdas del contrabajo. Al fondo, dilucidaba a un joven Paul Robinson, con las escobillas, repartiendo sacudidas a la caja y platillo de la batería, con la suavidad con la que sólo un batería de jazz puede hacerlo. Embobado con la escena apenas podía escuchar las primeras frases de la aterciopelada voz de Nina: “You ain't never been blue till you've had that mood indigo”. ¡Joder, que swing! Ni siquiera me molesté en entenderlo, simplemente me dediqué a disfrutarlo.

Cuando terminó el concierto, desperté. Me había quedado dormido como estos simpáticos animalillos africanos, los uricates. Dormido a luz del nuevo día, dormido ante mi pantalla RFT (esa que se ha cargado 1,5 dioptrías por ojo). Pero no me abrasaba los pies como ellos, todo lo contrario, los tenía congelados. Qué lástima que no encuentre nada de ellos en el Google. Y lástima también de Nina, ahora que las multinacionales automovilísticas destrozan sus canciones para vender ideas que no representan. Lástima que haya gente que no la reconozca por ser cantante y compositora, arreglista y pianista, Doctora Honoraria en Música y Humanidades, Alta Sacerdotisa del Soul, Reina de la Música Clásica de Raíces Africanas… Reina del swing, del blues, del jazz y de lo que queda por definir.

Yo, además, la reconozco por haber nacido el mismo día que yo. Sólo espero vivir la mitad de tiempo que ella.




Soy un uricate tomando el sol y durmiendo.

3.2.06

Parque Artificial.



¿Parque natural o artificial? ¿Fuegos naturales o artificiales?

La soledad.

La soledad es una puta de lujo para los que no tiene compañía,
la soledad es la asesina de los recuerdos de una joven pareja,
la soledad es una coraza para los que no sueñan con el futuro,
la soledad es la única respuesta a la ficción, a la desesperanza;

la soledad merienda sola una manzana podrida.

en una noche de desvariaciones...